¿Has estado prisionero (a) en una relación, o quizá conoces a alguien cercano que vive una relación difícil y tortuosa? Y te pregunto porque me refiero a esas relaciones que te atan, te atrapan, te capturan, te envuelven y dominan. Donde uno se puede dar cuenta que es una relación destructiva, tóxica y muy dañina y que además, te puede llevar a una esclavitud sin salida aparente. Pero a pesar de ser consciente de todo esto, NO PUEDES hacer nada, sabiendo también que esa persona puede arrasar contigo, sin que tu puedas evitarlo, es como si una parte de ti quiere liberarse y volar muy lejos, hasta que estés a salvo, pero otra parte te inmoviliza totalmente, a veces por meses, otros casos llevan en este proceso años y hay quienes terminan sus días sin realizar ningún cambio. Y esa dependencia es tan fuerte que no escucha razones, solo te somete como la única forma de mantener esa relación, por un motivo que ni siquiera entiendes. Tal vez en muchas oportunidades tomaste la determinación de alejarte de una vez por todas, olvidarte de llamadas, de enviar o recibir mensajes o de dejar de soportar que esa persona siga pisoteando tu autoestima cada vez más, sufriendo emocional, psicológica y en algunos casos físicamente. Pero luego de algunos días o tan solo horas, pierdes las fuerzas, y uno vuelve a recaer, y muchas veces, más profundo, como un circulo vicioso e interminable, porque es como si esa persona tiene el poder, ese poder invisible y destructivo de controlar tus actos, tus emociones y tu vida. En estos casos según muchas personas que he tenido la oportunidad de atender, me cuentan que les hace dar pasos en falso una y otra vez, teniendo plena consciencia de estar fallándote a ti mismo(a). Y es probable que muchos te lo hayan dicho, pero contra viento y marea sigues adelante, teniendo como único objetivo retener a esa persona sin importarte tu mismo(a) e ignorando cuánto vales y cuánto mereces realmente. Y mientras lees estas palabras te quiero preguntar: ¿No sé si te has pensado alguna vez, por qué uno sigue con esta relación que destruye tu autoestima, día a día ? ¿Por qué das TODO a cambio de nada?.
Ahora, quiero contarte que este tema es muy recurrente, porque son cientos y miles de mujeres y hombres que viven este infierno, cada día, en muchas vidas, y lo he comprobado en mi consulta, dónde esta fuerte realidad, aparece una y otra vez en las sesiones. Porque en una regresión uno puede conocer el porqué de esa dependencia emocional, y si comenzó en esta vida o tal vez, en una vida pasada. Y tú sabes que es maravilloso poder descubrir cuándo nacieron esa sentimientos, esas cadenas, que hoy te hacen sufrir. Y descubrir también ese "por qué" y junto con él, abrirte a la esperanza y a la posibilidad de un nuevo y posible cambio en tu vida, un mágico cambio porque a través de una regresión, puedes transformar esas emociones que hasta ahora han limitando tu vida.
Sólo imagina...si pudieras liberarte de esas cadenas emocionales que te han atrapado por años, tal vez por vidas. Imagina...cómo seria tu vida...porque hasta ahora nunca supiste que era posible para ti. Pero cuando una regresión te deja libre, tus ojos comienzan a ver el mundo como si lo vieran por primera vez, como si ese mundo fuera un MUNDO NUEVO, con una seguridad y sensación de tener por fin el control de tu vida, tus decisiones y tus acciones.
Y justamente en este momento, no puedo no recordar a Catalina, que en su regresión, buscando el origen de esa inmovilizadora dependencia emocional, su mente inconsciente, se transporta a España, a una época muy antigua, mientras se encuentra sumergida en una relación, con un hombre casado, con dos hijas. Y ella producto de ese amor había recibido como un regalo, un hijo, un hijo con el hombre que amaba, pero que no podía ser de ella. El niño, tenía 6 años de edad, fruto de ese amor escondido, que los que los unía poderosamente, a pesar del compromiso que los separaba al mismo tiempo. Esta vida oculta, invisible, pero llena de amor, y con un hijo como fruto, que parecía no poder terminar, seguía tan normal, pero paralela al mundo visible. Hasta que un día, uno de esos días que parece haber algo extraño en el aire, como cuando uno presiente que algo estar por venir...él decide abandonarla, en contra de su voluntad y en contra de su amor. Ella con el corazón destrozado, revivió esa ruptura sin poder aceptarlo....desde ese momento ese lazo quedó intacto hasta el final de esa vida en España y para aparecer nuevamente y fortalecido en su vida actual. Y ahora como si alguien encendiera la luz, Catalina podía entender por qué en esta vida, donde nuevamente estaba con este antiguo amor, pero ahora con otro nombre, con otro cuerpo y en otra época y lugar...el por qué de esa dependencia emocional, de esa imposibilidad de dejarlo ir...de perderlo...Claro, la regresión hablaba por sí sola, porque ya lo había perdido una vez, en esa época antigua en España.
Después de la sesión, Catalina queda muy sorprendida al sentir una agradable y nueva sensación de comprensión y alivio. Porque a medida que pasaban algunos días empezó a percatarse y hacerse consciente de que ya no necesitaba a ese hombre en su vida actual, al protagonista de su infelicidad. El nuevamente...ya no más, porque ahora se sentía capaz de cerrar ese circulo para siempre, cómo nunca antes lo había podido hacer. Y sólo unas semanas después me escribe contándome que se sentía libre, llena de valor y que estaba dispuesta y preparada a dar ese paso tan importante y definitivo, ese paso que finalmente liberaría su vida y su alma.
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Muchos Cariños
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